Puedes convertir el lugar de aislamiento en un cielo o en un infierno ¿cuál eliges?
El aislamiento y el periodo de crisis que estamos atravesando puede llegar a causar estados emocionales exagerados, por ejemplo: el pánico y la ansiedad. Y como vimos en nuestro artículo sobre el Coronavirus, debemos aprender a gestionarnos para evitar el estrés.
Las claves que vamos a suministrar se encuentran dentro de tres aspectos: físico, emocional y de concienciación. Empecemos:
Físico
Clave 1. Establece una rutina
- Define un plan de actividades para los niños y adultos mayores: Los niños en particular necesitan actividad y la rutina te ayuda si eres padre o madre para evitar el estrés. Asimismo, a reducir la sensación de descontrol e inseguridad que puede ocasionar la anormalidad que estamos viviendo. De igual modo, las personas mayores necesitan tener actividad, recuerda con son las personas más vulnerables y requieren ocuparse para contrarrestar el estrés. Los niños deben estudiar, cumplir obligaciones domésticas, actividades recreativas individuales y en conjunto (compartir en familia). Dentro de estas últimas, tenemos, por ejemplo: brigadas de limpieza en familia -sería una oportunidad de asear los rincones de manera entretenida y ahuyentar el virus Coronavirus-, juegos de azar, juegos de pensar o estrategia para ejercitar el cerebro, origami, manualidades, etc. Recuerda que es momento de ingenio, creatividad y adaptación.
- Disponte para la rutina: No te quedes en pijama todo el día, no estás de vacaciones (periodo de aislamiento). La mente inconsciente es simbólica e interpreta aquel acto como si te dispusieras a dormir o descansar. También, chequea que tienes lo necesario para las actividades, por ejemplo, si programas pintar con los niños vigila que poseas pintura previamente, pues no es conveniente que estés variando la rutina con frecuencia, genera inseguridad en especial para los niños.
- Programa actividad física: El cuerpo necesita moverse para activar el cerebro y contribuir a mantener tu salud. Elije algo que te agrade. Encuentra programas físicos adecuados para los niños, tus padres y para ti. Hoy en día en YouTube existe cualquier cantidad de prácticas para ejercitar el cuerpo en casa.
- Siguiendo con el punto anterior, quiero hacer énfasis en lo siguiente: Desde el punto de vista biológico, cuando estamos ante una amenaza (el COVID-19), el miedo nos provoca tres tipos de actitudes: huir, quedarse quieto o enfrentar. La única posible en aislamiento es “quedarse quieto”, entonces si nuestro miedo se manifiesta con las otras dos, debemos canalizar las hormonas (cortisona, glucagón) mediante ejercicio para liberarlas y evitar el estrés.
- Vigila la alimentación: Establece un plan de comidas que favorezca el sistema inmunológico. Adáptate a las circunstancias, es decir, si vas al supermercado y nada más encuentras brócoli, pues aprende a cocinar este alimento. Recuerda que adaptarse es una condición básica en esta situación.
- Aprende algo nuevo cada día. Piensa en aquello que deseas aprender y que por diversas vicisitudes todavía no has podido realizar. Existen innumerables plataformas de cursos online para que escojas.
- Respeta los horarios de la rutina, en especial de sueño, comida. La medida es: si eres rígido, elasticidad y si eres distraído/a, más rigidez.
Mental
Clave 2. Suspende la búsqueda de información sobre el Coronavirus
No des credibilidad a todo lo que ves, oyes y te dicen. Ten en cuenta que, ante el pánico, existen dos tipos de actitudes: el victimismo o la evasión.
Para aclararte las actitudes, veamos un ejemplo de victimismo. Lo encontré en el caso de una de mis consultantes. Nada más decretaron la cuarentena, un primo la llamó para despedirse por si acaso se morían y no volvían a verse, aunque estaba completamente sano. Ahora, la evasión se refleja en aquel que dice: nada va a pasar, soy optimista, hablan tonterías, creo en Dios, todo es mente, etc. Fíjate que en ambos existe un factor común: la exageración. Por eso, no te fíes de lo que dice la gente.
Clave 3. Identifica tus sensaciones desagradables
¿Cuáles son los pensamientos recurrentes? ¿Qué sientes? ¿Con qué relacionas esto que sientes o piensas? ¿Qué te produce miedo?
Los pensamientos son ideas y las ideas se convierten en creencias, y las creencias tienen poder porque se lo das. De idéntico modo, puedes quitarles el poder con otros pensamientos. Unos que hagan contrapeso para equilibrarte o mermar el miedo ¿Y cómo conseguir eso? Observemos unas estrategias:
- Ver documentales, series o películas que amplíen tu consciencia. Pero ten en cuenta que es diferente ver a vivenciar.
- Leer libros o artículos que te reconforten emocional, mental o espiritualmente. También puedes buscar talleres o cursos online en esta línea, es decir, que te ayuden a gestionar tus emociones, a peregrinar en tu interior y conocerte.
- Realiza actividades que te transmitan paz, como: música, ejercicios de relajación, meditar, hacer yoga, orar, bailar o danzar, etc. en YouTube existe todo un mercado a tu disposición.
- Encuentra ayuda profesional, en caso de que no puedas superar el pánico ni la angustia con las estrategias y ejercicios que te estoy dando.
Clave 4. El pánico o la angustia puede venir de tu historia, de tu clan familiar
Hoy cuando escuché a una persona, que sigo en redes sociales, comentar qué medidas estaba tomando para evitar el contagio, no pude rehuir sentir la influencia del transgeneracional en su comportamiento. Ese hombre dijo: "salí a recoger las cajas del domicilio que traía la comida con mascarilla, guantes hasta los codos y gafas oscuras". Aquí tenemos un proceder exagerado -un signo que muestra una conexión con su historia familiar-, pues el hombre ni siquiera tenía contacto físico con el repartidor.
Espiritual
Clave 5. Comprender el significado profundo de la crisis
- El medioambiente: La mayoría de las personas no querían dejar su vehículo tan siquiera por un día; ni dejar de viajar cortas distancias en avión; ni reciclar y dejar de botar la basura y los contenedores al mar; ni de cazar por deporte; ni dejar de comer comida basura y comida por gula; ni dejar de trabajar para tener tiempo de cuidar a sus hijos, etc. Ahora los vehículos y muchos aviones están estacionados; hay menos basura en los mares; los restaurantes están cerrados; los padres tienen que quedarse en casa -quizás haya muchos niños y niñas felices-; el planeta respira, los animales salvajes están libres del invasor: nosotros, los humanos.
- El sistema laboral: Las grandes empresas tuvieron que mandar sus empleados a trabajar desde casa (teletrabajo). Una opción que se venía reclamando para contribuir con el medioambiente, la conciliación familiar, satisfacción y bienestar del trabajador, entre otras.
- La inversión de valores: Esta crisis ha puesto a cada uno en su lugar y en el orden de los valores. Las diversiones pasaron a segundo plano; los famosos dejaron de ser los héroes y líderes; salir de fiesta ya no es indispensable, ni la moda, comprarse unos zapatos Nike o Adidas no es de vida ni muerte; tampoco estudiar es tan malo como se creía, las mascotas no merecen más atención que los “viejos” (padres), el trabajo no es primero que los hijos; etc. Ahora, los héroes son los médicos, enfermeros/as y personal de salud; los limpiadores y cuidadores de nuestros mayores; los transportistas que nos traen la comida a casa, la policía que nos salvaguarda de que se cumplan las medidas y poner a cada insensato en su lugar; los agricultores que nos permiten no sufrir de hambre, etc.
- Siguiendo con la anterior y los valores: resulta que las oraciones y ayudas económicas están dirigidas al personal de salud, la limpieza, el cuidado, el campo, la distribución, la vigilancia y para los científicos -los estudiosos, "nerds” y acosados- son aquellos por quienes imploramos para que se mantengan saludables y cumplan con su labor. En especial, rogamos por los científicos para que encuentren la vacuna contra el virus COVID-19. Incluso, en Italia, las personas jubiladas en el área de la salud están regresando a trabajar y, también, están pidiendo ayuda a personal procedente China y de Cuba, y son de raza negra -justo la raza que algunos italianos despreciaban para llegaran a sus costas-. Estamos en sus manos -no importa la raza ni el color, ni la edad-¡qué lección!-. Mientras que hace unos pocos días eran los profesionales que habían sufrido mayor maltrato gubernamental y desprestigio social.
¿Encuentras algún significado? ¿Qué tienes que ver con esto? ¿Será que la causa de lo que está sucediendo somos nosotros? ¿Cuál es la inversión de pensamiento que nos esta exigiendo esta crisis? ¿Que nos está avisando la naturaleza?
Mi mensaje para ampliar la consciencia
¿Qué nos quiere decir esta pandemia para que ampliemos nuestra consciencia?
Pero al mismo tiempo, esta situación nos enseña que mi comportamiento, pensamiento y sentir influye en los demás, debemos aprender a ser solidarios y cooperativos: coexistimos. El aislamiento es una condición que representa solidaridad con aquellos más vulnerables, y todas las medidas preventivas nos invitan a la cooperación. Ambas virtudes han sido claves en el desarrollo de la vida y la evolución: volvemos a las raíces.
Comprender que somos un universo y a la vez somos parte de otro universo, parece ser el mensaje de consciencia profundo que contiene esta experiencia que estamos viviendo. Pues lo que hagamos, pensemos y sintamos va a influir sobre los demás y viceversa. Eso ha sido así siempre, solo que hasta ahora tomamos consciencia.
Los virus son transformadores de la célula; por tanto, de nosotros, de la tierra, del universo.
Si encuentras otros mensajes de consciencia los espero en los comentarios para que sigamos aprendiendo juntos.
¡Te invito a compartir tus experiencias sobre el tema!
Escritora, Especialista y
Certificada en Bioneuroemoción© BNE
Facebook: Luz
en tu camino interior
Twitter: luzentucamino26
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