EXISTE LA COMPULSIÓN AL DINERO?
A raíz de un artículo que se
publicó recientemente, en varios medios de comunicación escrita, en el cual
decía: “85 individuos acumulan tanta riqueza como los 3.570 millones de
personas que forman la mitad más pobre de la población mundial”; me he
propuesto analizar un poco el ego de aquellas personas que a través de la
manipulación de los demás, acumulan riqueza de forma obsesiva. Ellos aplican la
conocida frase: “el fin justifica los medios”, algunos de dichos individuos aprenden
a esquivar la justicia con estratagemas, otros mantienen al límite de la ley;
no obstante suelen sobrepasar las fronteras de lo ético.
Observando y analizando la
situación, he podido establecer que las personas que de forma desmedida buscan
acumular dinero, presentan presumiblemente una obsesión por el mismo y al igual
que cualquier enfermedad de este tipo, son personas que pierden el control de
su vida, incapaces de alejarse del asunto compulso, su pensamiento y acciones
están gobernadas por ello, de tal modo que aquello se constituye en el principal
objetivo de su vida. Son individuos sin competencia
para discernir, impartir justicia, ser objetivos y mucho menos para ser
bondadosos; ven en cualquier asunto “un negocio” y la forma de ganar dinero
para sí mismos. Tristemente podemos contemplar
lo anterior, en organizaciones que fueron creadas para ayudar a la gente como
las llamadas “ONG o Fundaciones”, de las cuales, individuos como de los que
estamos hablando, las han convertido en el lugar para evadir impuestos, hacer
negocios y obtener beneficios propios.
Para reflexionar sobre lo
anterior yo te pregunto, ¿conoces de este tipo de individuos? seguramente tu respuesta será
afirmativa, pues a diario las vemos o escuchamos en las noticias, algunos nos
gobiernan, son los directivos de bancos o entidades financieras, dirigen
empresas o son los dueños. Es indudable que todo lo anterior nos conduce a responder
la siguiente pregunta ¿Por qué no los vemos cómo enfermos? respuesta que deriva
en otra ¿por qué
permitimos que esta persona desarrolle su adicción con nosotros?. Pues bien, la respuesta conlleva a la
profundización sobre nosotros mismos y para lograrla tomemos algunos de los
fundamentos de Alcohólicos Anónimos, en ellos se dice que si tu convives con un
alcohólico, tu eres un co-dependiente, ósea que necesitas vivir con este individuo
para continuar desarrollando la forma de vivir que conoce, dando lugar a la
reflexión más importante ¿Será posible que estemos tan enfermos como ellos y
los necesitamos para que nos exploten y manipulen, ya que es la vida que
conocemos y en la cual nos sentimos cómodos?
¿Tú qué crees?
No hay comentarios:
Publicar un comentario